Hace unos días en un noticiero de radio dieron a conocer las resultados de una encuesta de optimismo que hicieron a nivel nacional, en el que mencionaban por ejemplo que Nuevo León tenía uno de los índices más altos sobre la manera en que la gente de ese sitio sentía sobre su forma de vida, ahí, decían, 7 de cada 10 se sienten satisfechos, contentos con su nivel de vida. Y así iban mencionando a la mayoría de los estados hasta llegar al de Guerrero en el que 5.4 de cada guerrerense de 10 se siente a gusto con su forma de vida, mientras 4.6 manifiestan sentirse a disgusto. De acuerdo a esos datos, nuestra entidad se encontraba entre los últimos de optimismo. La información podría ser real, si entendemos que en los últimos años se ha tenido una andanada de acciones de alto impacto que hemos sido noticia constante de violencia a nivel nacional. Aunado a esos datos, también mencionaron que 1 de cada 4 jóvenes quisieran ser parte de actividades delictivas, antes de integrarse a acciones productivos y positivas. Y qué pasa? Pues que en cuanto a los jóvenes no vemos una política pública real de atención. Acapulco requiere de una atención especial en cuanto a los jóvenes. Un ejemplo es que cada vez que hay una inversión destinada a los chavos, ésta tiene que ir exclusivamente al deporte. Inauguran e inauguran unidades deportivas, como si sólo eso fuera referente de la juventud. Le falta mucho a las autoridades por comprender a los jóvenes… y se les está pasando el tiempo.

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