Algo que estamos seguros que marcará tu vida por siempre, son los tiempos como estudiante. Son irrepetibles, inigualables. En el transcurso de los años te darás cuenta que si alguien se brinca una etapa estudiantil, difícilmente podrá recuperarla, aún cuando años después la quiera volver a vivir. Por un detalle, en el ciclo se conjuga edad y escolaridad… y se vive intensamente.

Por eso, ahora que acaba de pasar el Día del Estudiante hay que tratar de disfrutar esta parte esencial que nos tocó vivir. Los días de estudiar, estudiar y estudiar para un examen, los trabajos en equipo, que nunca falta el que no hace nada (y en algunas ocasiones ese papel te toca a tí hacerlo jajaja), cuando no duermes porque el maestr@ ya sentenció al grupo de que muy pocos pasan en su materia…
Pero también, esos momentos agradables de conocer gente nueva al inicio del ciclo que con el tiempo se convierten en esos herman@s que la vida te obsequia y que sabes que contarás con ell@s toda la vida.

Y es que eso es neta, algo de lo que no te arrepentirás en tu vída escolar-universitaria son las grandes amistades que vas logrando durante su paso… y en algunas de las ocasiones éstas se tornan en historias románticas, de amor eterno (hasta que la graduación los separa jajajaja) y que con el paso del tiempo se fortalece una amistad para siempre.

Te decimos todo esto, porque en Acapulco últimamente al referirse a los jóvenes se empieza a generalizar en acciones negativas y la verdad es que aquí los chav@s hacen un buen de cosas positivas, de buena onda y sobre todo de amistad y compromiso por buscar mejores oportunidades de vida.

Así que ya sabes, los días de estudiante son algo que no debes desperdicar, por el contrario, busca sacarles el mayor provecho posibles y ve construyendo tu propia historia para que en un futuro puedas disfrutar de lo que siembres en esta súper etapa de tu vida.

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